¿Realmente una persona puede sentir cuando llega su final? A lo largo de la vida hay muchas veces en las que, desgraciadamente, no nos sentimos bien, nos sentimos débiles, sin fuerzas, solo con ganas de estar en la cama y no hacer nada más. Pero, realmente podemos saber cuando es la definitiva? Ayer tuve una paciente, una de tantas, que lo único que decía era "I feel unwell, help me". No sabía decirme que tenía o que sentía, el porque se sentía "unwell", pero son palabras que no dejó de pronunciar en todo el día hasta que, al final de la tarde, murió. 

Supongo que no es fácil ser enfermera, que sujetar la mano en las últimas horas de vida de una persona, no es fácil... Porque sí, los llamamos pacientes, el paciente de la cama 1 o de la cama 23, pero son personas, personas con nombres y apellidos, con familia, con historias, con vida, con necesidades, con vivencias (realmente interesantes), personas que acabas de conocer y de las que, la mayoría de las veces, te conviertes en sus manos y en sus piernas, personas a las que una enfermedad no las deja hablar, ya ves, hablamos desde que somos niños, y de repente, una enfermedad no te deja expresarte, no te deja decir que necesitas agua, que tienes dolor o, simplemente, no te dejan decir a tu marido, mujer o hijos que los quieres, aunque hay veces que las miradas dicen más que las propias palabras.

Tampoco es fácil "consolar" a esos familiares que han perdido a alguien, porque por mucho que queramos, no podemos saber que sienten, en la vida podemos decir, "te entiendo" o "se lo que estás pasando", claro que no lo sabemos.

O tampoco es fácil ver como un paciente te pregunta porque su hijo no viene a verla, que te pregunta por qué si tiene dos hijos y nietos nadie va a verla, te lo dice con lágrimas en los ojos, lágrimas sinceras, y con una cara de tristeza que pocas veces has visto igual... La sordera que padece le hace gritar un "I have 87 years and it is not nice been in my own for 2 days" y que le puedes decir? 

Supongo que por mucho que nos digan, que sepamos que no es fácil, que tienes que tratar con la vida y la muerte a partes iguales, que tendrás días malos, que hay que estar preparados para ello, no sabemos donde nos estamos metiendo...